Te contamos la BIOGRAFÍA de DONALD TRUMP y diversas CURIOSIDADES relacionadas con este empresario y político de los Estados Unidos de América.
El 16 de junio de 2015, en la ciudad de Nueva York, Donald Trump agitó el panorama político mundial cuando anunció que se presentaría como candidato a la Presidencia de los Estados Unidos de América con la intención, según él, de volver a hacer grande dicho país. El 6 de agosto de 2015 se celebró el primer debate entre los candidatos republicanos que pretendían hacerse con la nominación de su partido para llegar a la Casa Blanca.
Donald Trump acaparó toda la atención con declaraciones como las siguientes: «creo que el gran problema de este país es ser tan políticamente correcto». Al final, logró convertirse en el candidato que disputaría a Hillary Clinton la presidencia del país más importante del mundo (el resto de sus contrincantes terminaron retirándose, siendo oficialmente elegido como candidato en la convención que el Partido Republicano celebró entre el 18 y el 21 de julio de 2016). Pero, ¿quién es Donald Trump? ¿De dónde proviene su fortuna? ¿Fue siempre tan carismático? Intentaremos resolver vuestras dudas sobre este personaje en el siguiente artículo.
Donald Trump acaparó toda la atención con declaraciones como las siguientes: «creo que el gran problema de este país es ser tan políticamente correcto». Al final, logró convertirse en el candidato que disputaría a Hillary Clinton la presidencia del país más importante del mundo (el resto de sus contrincantes terminaron retirándose, siendo oficialmente elegido como candidato en la convención que el Partido Republicano celebró entre el 18 y el 21 de julio de 2016). Pero, ¿quién es Donald Trump? ¿De dónde proviene su fortuna? ¿Fue siempre tan carismático? Intentaremos resolver vuestras dudas sobre este personaje en el siguiente artículo.
Biografía de Donald Trump
Para algunos, Donald Trump es la personificación del sueño americano, el hombre hecho a sí mismo. Él propio magnate declaró en una entrevista que «no lo he tenido fácil. Comencé en Brooklyn. Mi padre me hizo un pequeño préstamo de un millón de dólares. Vine a Manhattan». Sin embargo, sus detractores opinan que es la típica persona a la que le dieron todo hecho pero presume de haberlo logrado todo con su esfuerzo. Y es que, desde luego, no muchos pueden permitirse el lujo de que le presten semejante cantidad de dinero. Su respuesta al respecto es la siguiente: «un millón de dólares no es mucho comparado con lo que he creado».
Lo cierto es que Donald Trump proviene de una familia adinerada. Su padre fue Fred Trump y su madre Mary Anne MacLeod. El primero era el vástago de un inmigrante alemán que se dedicó con éxito al negocio de los inmuebles. De hecho, construyó viviendas sociales en Queens y Brooklyn para los soldados que regresaban de la Segunda Guerra Mundial. Fue uno de los pocos constructores de la época que comenzó en este negocio ganando una gran fortuna con ello. Era una persona muy austera, e incluso se decía que, cuando los trabajadores se marchaban, iba a las obras a recoger los clavos que había en el suelo y los volvía a dejar para que los reutilizaran. Cuando el pequeño Donald Trump quería pasar tiempo con su padre, visitaba con él las obras. De hecho, al cumplir cinco años condujo su primera excavadora.
Durante los años 60, los proyectos de construcción de Trump se extendían por toda la ciudad, si bien tan sólo prestó su nombre a uno de ellos: Trump Village. Se trataba de un oasis para la clase media cerca de las atracciones de Coney Island. Pero, a pesar de ello, Fred Trump parecía querer pasar desapercibido, una cualidad que su hijo no heredaría. De hecho, Donald Trump creció en la creencia de que le esperaban todas las riquezas del mundo. Un ejemplo de ello es que los domingos iba a la iglesia con su familia y escuchaba los sermores del pastor Norman Vincent Peale, autor del libro "El principio positivo: Cómo alcanzar lo imposible a través de la inspiración y la motivación", sobre cómo ser la mejor persona que uno puede ser. El propio Donald Trump admite que «odiaba marcharme de la iglesia. Odiaba que terminase el sermón. Así de increíble era».
Fotografía de Donald Trump (izda.) cuando eran un niño |
Donald Trump en la Academia Militar de Nueva York |
Hay que tener en cuenta que, en la década de los 70, la zona centro de la ciudad no era precisamente segura, motivo por el cual resultaba más barato comprar terrenos. ¿Qué es lo que hizo Donald Trump? Adquirir propiedades y esperar a que este problema se solucionara. Fue en 1974 cuando hizo su primera jugada importante en Manhattan: asegurarse la opción de desarrollar la playa de maniobras de los ferrocarriles Penn Central. Esta compañía estaba en quiebra, comprometiéndose Donald Trump a mejorar la ruinosa propiedad. Lo llamativo es que no pagó nada por los derechos, puesto que la simple promesa de construir fue suficiente para que el promotor obtuviera la aprobación. Sus contactos y su carisma sin duda le ayudaron en este negocio. Así, en 1978 presionó al ayuntamiento para que construyera un centro de convenciones en la playa de maniobras de la estación ferroviaria. No obstante, informó a los medios de que el acuerdo ya estaba cerrado, y lo hizo antes de consultar con el alcalde (lo que provocó un enfrentamiento que se prolongaría durante años y en la que no faltarían los insultos mutuos).
En 1976 inicia un proyecto para transformar el ruinoso Hotel Commodore, que precisamente se encuentra situado junto a la terminal Grand Central, en un símbolo del renacimiento de la ciudad de Nueva York. Aunque otros promotores quisieron quedarse con este edificio, finalmente fue Donald Trump el que lo adquirió (algo que no era visto con buenos ojos por su padre). Su intención era convertirlo en el hotel más exitoso de los Estados Unidos. Dado que el edificio se hallaba en un estado deplorable, consiguió una rebaja fiscal por hacerse con el inmueble.
La inauguración del Grand Hyatt New York, nombre del remozado hotel, se llevó a cabo en 1980, deslumbrando a todos con su fachada de cristal. Por supuesto, Donald Trump aprovechó la situación para contar las bondades que su proyecto le reportaba a la sociedad: «hemos creado miles de puestos de trabajo para personas que ahora no los tendrían. Sospecho que simplemente hemos aportado felicidad a muchas familias que, en lugar de tener que recurrir a la beneficencia, ahora van a casa con un buen salario. Creo que, en cierto sentido, me pusieron en la Tierra para cumplir esa función. Y creo que es una función importante».
Seguimos en 1980, año en el que apoya de manera incondicional la campaña presidencial de Ronald Reagan. De hecho, da la impresión de que Donald Trump emula los discursos del ex Presidente de los Estados Unidos, ya que éste lanzaba mensajes en los que decía cosas como la siguiente: «les daremos la bienvenida a una gran cruzada nacional para hacer a América grande de nuevo».
Ese mismo año comenzó la transformación de los antiguos almacenes Bonwit Teller en lo que ahora se conoce como la Torre Trump, un enorme rascacielos situado en la Quinta Avenida. Nuevamente consiguió una reducción de impuestos de millones de dólares por parte de las autoridades, prometiendo a cambio una importante creación de puestos de trabajo. Por entonces, su fortuna estaba valorada en unos 400 millones de dólares.
Donald Trump sobrevuela las Torres Gemelas de Nueva York |
Sin embargo, Donald Trump comienza a diversificar en sus inversiones, y lo hace con algo que no guarda relación alguna con el mercado inmobiliario. Así, en 1984 se hace con un equipo de fútbol americano, los New Jersey Generals, por 9 millones de dólares. Desde el primer momento quedó claro que no se trataba de algo con lo que pretendía ganar dinero, sino que para él era una forma de ocio. No obstante, en 1986 propone a la USFL que la competición se juegue en otoño en lugar de la primavera, interponiéndose una demanda por monopolio contra la NFL. Lo que se pretendía era que se fusionaran ambas ligas. Los jueces le dan la razón, pero imponen una pequeña indemnización de un dólar que, obviamente, no contenta a nadie.
En 1985 adquiere Mar-A-Lago, una lujosa mansión situada en Palm Beach (Florida) que le costó 7 millones de dólares y que cuenta con 118 habitaciones y casi siete hectáreas. No obstante, el matrimonio Trump tuvo que restaurarla, ya que se encontraba prácticamente abandonada.
En 1986 la fortuna de Donald Trump ya se eleva hasta los 700 millones de dólares. Es entonces cuando surge una nueva muestra de su ego, puesto que se ofrece para concluir la pista de patinaje situada en Central Park (al ayuntamiento de Nueva York no es que le sobrara el dinero para terminar la obra, de ahí que llevara años y años sin rematarse). Por supuesto, esto le reportó la simpatía de muchos habitantes de la ciudad.
Es entonces cuando escribe un libro titulado "El arte de la negociación", que sale al mercado en 1987. El texto es una guía para obtener el éxito empresarial mediante once tácticas de negociación diferentes, incluyendo algunas como "usa tu influencia", "piensa a lo grande" y "contraataca". Podéis ver un resumen de la mayoría de ellas en uno de nuestros artículos más leídos. El libro fue todo un éxito y se mantuvo durante 51 semanas en la lista de los libros de no ficción más vendidos del New York Times.
Su fortuna por aquel entonces ya ascendía hasta los 850 millones de dólares, así que a nadie le sorprendió que comprara el tercer yate más grande del mundo (valorado, atentos, en 150 millones de dólares, si bien Donald Trump lo consiguió por "sólo" 30 millones).
En 1988 adquirió el hotel más famoso de Nueva York: el Hotel Plaza. Le costó 390 millones de dólares, invirtiendo luego otros 50 millones en su reforma. Su esposa Ivana sería la directora del mismo.
Su siguiente objetivo fue Atlantic City (Nueva Jersey), una zona turística que estaba en decadencia y en la que Donald Trump comenzó a crear casinos. El primero de ellos fue el Trump Plaza, siguiéndole luego el Trumps Castle. En definitiva, quería crear una copia de Las Vegas en la costa este de los Estados Unidos de América.
Donald Trump inaugura uno de sus casinos |
A pesar de ello, en 1989 su patrimonio asciende a 1700 millones de dólares. De hecho, en 1990 inaugura el Trump Taj Mahal, un espectacular y opulento casino que fue acumulando cuantiosas deudas (3000 millones de dólares), en buena parte debido a la crisits económica. Fue tal el desastre que la revista Forbes lo suprimió de la lista de las personas más ricas de los Estados Unidos, aseverando que su patrimonio había pasado de los citados 1700 millones... ¡a cero! Algunos incluso pensaban que la marca "Trump" podía desaparecer. Para evitarlo, el magnate se declaró en bancarrota.
Finalmente, Donald Trump pudo llegar a ventajosos acuerdos con los bancos, negociando una reorganización de la deuda. Para mantener abierto el Taj Mahal, tuvo que ceder la mitad de sus acciones personales y vender el lujoso yate que había adquirido años atrás y la flota aérea.
Pero las cosas tampoco le iban bien con el Hotel Plaza de Nueva York, ya que en 1992 su deuda era de 550 millones de dólares. Como parte de la reestructuración de su empresa, tuvo que renunciar a su participación del 49% de la propiedad, si bien mantuvo su puesto como presidente ejecutivo (aunque sin cobrar un salario por ello).
Curiosamente, la relevancia mediática de sus problemas matrimoniales provocaría que su nombre estuviera en boca de todos, aumentando aún más su popularidad (hablaremos un poco más adelante de su vida privada). En los 80 ya se interpretó a sí mismo en la pésima película "Los fantasmas no pueden... hacerlo" (1989), pero luego también hizo lo propio en largometrajes como "Solo en casa 2: Perdido en Nueva York" (1992), "Eddie" (1996), "Cómo triunfar en Wall Street (en un par de horas)" (1996) -estos dos últimos títulos estaban protagonizados por Whoopi Goldberg-, "Celebrity" (1998) y "Zoolander" (2001).
También se dejó ver en series de televisión como "La niñera", "El príncipe de Bel Air", "Spin City: Loca alcaldía", "Sabrina, cosas de brujas" y la fabulosa "Monk", por no mencionar los numerosos programas a los que acudió como invitado.
Si a todo esto le sumamos el hecho de que su nombre ha estado ligado durante lustros a la organización de los eventos en el que se elige a Miss Universo y Miss Estados Unidos de América, parece claro que siempre le ha gustado ser una figura pública.
El caso es que la economía empezó a mejorar, especialmente en lo relativo al mercado inmobiliario, algo que le ayudó a recuperar su fortuna. De hecho, en 1996 su patrmimonio estaba valorado en 400 millones de dólares.
Aunque con anterioridad ya se había mencionado la posibilidad de que se introdujera en el mundo de la política, no fue hasta 1999 cuando se tomó el asunto en serio. El Partido de la Reforma de los Estados Unidos, que por aquel entonces contaba con Jesse Ventura como gobernador de Minnesota, le ofreció ser su candidato a la presidencia de los Estados Unidos. Donald Trump se lo pensó, pero finalmente descartó la idea al comprobar que dicho partido era un desastre y que, según sus propias palabras, se estaba «autodestruyendo».
Se centra, pues, en su empresa, de tal modo que en 2001 inaugura la Trump World Tower, un rascacielos de 90 pisos destinado a uso residencial. El valor del edificio por aquel entonces era de 360 millones de dólares.
Donald Trump presenta "The apprentice" |
Siendo toda una celebridad, no es de extrañar que Mark Burnett, el creador de "Supervivientes", le presente la idea de "The apprentice", un concurso de televisión en el que distintos jóvenes interesados en el mundo de los negocios tienen que trabajar durante un año en la empresa de Donald Trump. El programa comenzó a emitirse en 2004 y, durante su primera temporada, se convirtió en un gran éxito de audiencia (20 millones de espectadores lo veían cada semana).
A partir de entonces parece dejar de lado el sector inmobiliario para potenciar su apellido como marca, bien sea en juegos de mesa, colecciones de muebles, perfumes, bebidas, ropa, chocolates, restaurantes o productoras de televisión.
Como comentábamos al principio de este artículo, en junio de 2015 se presenta a las primarias del Partido Republicano para ser candidato a la presidencia de los Estados Unidos de América. A pesar de que en un principio todo el mundo pensaba que se trataba de una de sus habituales campañas para promocionar su imagen, finalmente logra imponerse al resto de sus oponentes.
Curiosidades de la vida personal de Donald Trump
En lo que respecta a su vida personal, señalar que en 1977 se casó con Ivana Zelníčková (no sin que antes ésta firmara un acuerdo prenupcial). Su esposa se encargó de la decoración de algunos de sus proyectos más relevantes, caso del Grand Hyatt New York o de la Torre Trump. Tres hijos nacieron fruto de este matrimonio: Donald, Jr. (31 de diciembre de 1977), Ivanka (30 de octubre 1981) y Eric (6 de enero de 1984). Sin embargo, Donald Trump engañó a su esposa con Marla Maples, una joven actriz, motivo por el cual la pareja se divorció en 1992.
Donald Trump con Ivana, su primera esposa |
En 1998 comienza a salir con la modelo Melania Knauss, casándose con ella a principios de 2005 (su pareja tiene que firmar antes un acuerdo prenupcial). En 2006 nace Barron William Trump, el único hijo de la pareja.
Frases de Donald Trump
«Todos jugamos al mismo juego. Y quienes más lo disfrutan son siempre los que ganan». 6 de octubre de 1980.
A la pregunta de qué haría si perdiera toda su fortuna, responde lo siguiente: «quizás me presentaría a presidente. No lo sé [...]. Me encantaría, y dedicaría mi vida a este país [...]. Creo que alguien con un punto de vista tan determinado, alguien con una visión tan clara, podría ser bastante impopular. Aunque tuviera razón. No tendría la oportunidad de ser elegido frente a alguien sin cerebro pero de sonrisa grande. Y esa es una reflexión muy triste sobre el proceso político». 6 de octubre de 1980.
A la pregunta de qué haría si perdiera toda su fortuna, responde lo siguiente: «quizás me presentaría a presidente. No lo sé [...]. Me encantaría, y dedicaría mi vida a este país [...]. Creo que alguien con un punto de vista tan determinado, alguien con una visión tan clara, podría ser bastante impopular. Aunque tuviera razón. No tendría la oportunidad de ser elegido frente a alguien sin cerebro pero de sonrisa grande. Y esa es una reflexión muy triste sobre el proceso político». 6 de octubre de 1980.
«Bueno, nunca se sabe. Creo que soy bastante franco, y eso seguramente no me beneficiaría en la política. Pero me vendría muy bien si saliera elegido, para hacer mi trabajo», respondió el 17 de diciembre de 1987 cuando se le preguntó sobre su posible participación en la política.
«No lo hago por presumir. No nececisto presumir. No me hace falta, lo creáis o no».
Fuentes: The History Channel, Wikipedia
Fuentes: The History Channel, Wikipedia
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